domingo, 11 de mayo de 2025

5#. La era digital (Reflexión)

 No estoy en contra de los avances tecnológicos, siempre y cuando sean realmente útiles para mejorar la calidad de vida de los seres del planeta, pero joder, es absurdo a lo que hemos llegado.

Recuerdo cuando era niño, y soñaba con tener la Game Boy. Se la vi a mi primo un par de esos veranos en los que él, mi prima y mis tios bajaban al pueblo de vacaciones.
Yo quería ese cacharro. Era tecnología de la época, pero era una tecnología más tranquila, más casual, menos "absorbecocos"

Pasó el tiempo y mis padres, con mucho esfuerzo, porque somos de clase obrera, no unos pijos de mierda, pudieron regalarme para los reyes magos mi primera Game Boy Color con el Juego del Duke Nukem y el Shadowgate.
Recuerdo la ilusión que me hizo. Y tambien recuerdo que jugaba un par de horas al dia como mucho y estaba satisfecho, y no dejaba de lado mi gusto por el dibujo, ni salir a la calle a jugar con mi hermano, montar en bici y hacer cosas de crios. 

Hoy veo a los niños en la calle con la puta mirada clavada a esas pantallas "absorbecocos" de mierda, mirando videos de subnormales, haciendo el imbécil y diciendo gilipolleces. Y veo a las niñas grabándose con poses sexualizadas para subir "tiktoks" con esa puta música apestosa que las pone de putas para arriba y me digo a mi mismo con una especie de tristeza y rabia: "El puto sistema ha ganado..."

No puedo juzgar a las nuevas generaciones, claro que no. Sería hipocrita por mi parte, porque al final yo también estoy todo el puto día con la cara metida en ese puto "teléfono inteligente" que cada vez me vuelve mas tonto a mi. Y creo que ser consciente de ello me genera más frustración si cabe.

Llevo un tiempo intentando desdigitalizarme, e intento hacerlo dejando de usar el "smartphone" durante días enteros y usando un nokia viejo que solo admite hacer y recibir llamadas.
Es satisfactoria esa desconexión, la verdad.

Reflexionando sobre el tema, he llegado a ver como las facilidades que nos ofrecen las tecnologías, han hecho que las cosas hayan perdido su valor. Por ejemplo, la fotografía, los libros, el acceso a la música, etc.

Antes, tenías una camara con una pelicula de 24 o 36 disparos que tenías que administrar bien antes de llevar a revelar el carrete. Y esas fotos eran personales, tenian alma, aunque estuvieran hechas como el puto culo, sobreexpuestas o subexpuestas. 
Incuso la forma de ver esas fotos era diferente. Se convertía en un acto social el hecho de ojear un álbum en familia recordando momentos.

Los libros igual. Antes te pateabas las librerías sabiendo que es lo que querías encontrar, lo conseguías y lo primero que hacías era oler sus páginas antes de ponerte a leerlo por la noche antes de dormir. Ahora te lo descargas, lo metes en un E-book de esos y ala...

Y la musica...Ay! la musica...
Desde que salió el Spotify, la música ya no vale para nada.Y la mayoría de los que hacen música hoy no valen para nada tampoco. Por no hablar de lo que se está haciendo ahora con la inteligencia artificial...No hay identidad, es todo demasiado rápido, no tiene valor, es fugaz y fácil de conseguir.
Antes te comprabas o mangabas un disco o una cinta y era la música que ibas a escuchar durante todo el año.
Incluso la labor de "pirateo" era más cálida que ahora.
Recuerdo poner los sabados el programa de radio El Rimadero, que salia en Radio 3 creo. Y ahí tenías a Jotamayuscula presentandolo y poniendo canciones de rap del que todavía era bueno, mientras yo pulsaba el boton de REC+PLAY de mi radiocassette.
En todas las canciones que lograba grabar en la cinta aparecía el tipico "hahaaa locoooo" que Jotamayuscula decía mientras sonaba la canción. Precisamente para evitar la piratería.

No se si sera nostálgia o yo que se, pero estoy intentando hacer que todo lo que antes tenia valor para mi, vuelva a tenerlo hoy. Y para ello me compré hace poco (el día que se murió el Papa Francisco) una Canon Prima BF-80 (Canon Snappy QT) por 15 pavos, y un carrete de 35 mm Fujifilm C200 de 36 exposiciones, para no disparar a lo loco y sentir que las fotos que hago tienen el valor que deberían tener, porque esto de hacer 2000 fotos con el móvil a la misma escena y que esas fotos acaben olvidadas y perdidas en un cacharro que acabará roto por la obsolescencia programada, para mí, no tiene sentido.


Cómo me ha gustado tanto la sensación de tener ese cacharro entre mis manos, justo el día del apagón me compré otra cámara analógica. Una Ansco 700 AFS (Halina AF 700) por 8 pavos.
Es curioso que las dos cámaras me las haya comprado en momentos donde han surgiido "eventos históricos". ¿Será una señal? jajaja....



Y ya, con la fiebre que me ha entrado con la forma de las camaras esas, hace un par de dias fuí al Rastro Reto y me puse a mirar unas camaras que tenían allí, y vi una Premier PC 1050 por 10 pavos y me la compré tambien. Podría haberla mangado porque no había nadie allí... pero tio, esa gente ayuda a los yonkis a salir de esa mierda con la palabra de Dios y todo eso. Y además creo en el karma.



¿Para que coño quiero tantas camaras? Ni puta idea. 
Quiero ver como salen las fotos en cada una de ellas, y ya decidiré cual será mi favorita.


Bueno. Pues hasta aquí la reflexión de hoy. Ya no tengo más ganas de escribir y me he desahogado un poco. Que siempre viene bien.


¡Nos vemos en la carretera!✌





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